El aspirante al ayuntamiento marabino fue tratado por especialistas a
finales de los años noventa durante su estancia en la ciudad de Roma,
Italia. Miente para crear ante los demás una imagen falsa de sí mismo.
"Un joven mitómano (mentiroso) para dar una mejor imagen de sí ante los demás", es el resultado de las evaluaciones y tratamientos psicológicos al que fue sometido Miguel Pérez Pirela, candidato del Psuv a la Alcaldía de Maracaibo, en Italia.
Según la información colada a los medios de comunicación, el diagnóstico antes mencionado reposa en el reporte médico de la Doctora Rita Gagliardi, directora del Centro Di Psicoterapia Analitico-Bioenergetica, quien además destaca que el aspirante al ayuntamiento marabino ha presentado a lo largo de su vida “trastornos psicológicos” que ameritaron la evaluación de especialistas.
La primera vez que Pérez Pirela recibió atención psicológica fue durante sus estudios de licenciatura en Filosofía que cursó en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma (Italia) a finales de los años 90. Durante un ciclo de altibajos emocionales marcados depresiones y ansiedades.
En el primer encuentro con el paciente, la Psicóloga italiana destacó en sus anotaciones, la notable baja de autoestima, “factor que interviene negativamente en las personas que mienten (mitómanos) para formar ante los demás una mejor imagen de sí mismos”.
La mitomanía, es un trastorno psicológico que consiste en mentir de manera compulsiva y patológica. El mitómano falsea la realidad para hacerla más soportable e incluso puede tener una imagen distorsionada de sí mismo, generalmente con delirio de grandeza (lo que produce una gran distancia con la imagen real).
Lo habitual es que el mitómano mienta sin valorar las consecuencias de sus mentiras. Por eso adopta a la ficción como parte de su comportamiento social y crea sistemas falsos para sostener todos sus engaños.
Señala el documento médico, que el mencionado trastorno que presenta Pérez Pirela dio los primeros indicios durante su adolescencia cuando la relación con su progenitora se deterioró producto del comportamiento desviado del entonces estudiante de bachillerato.
Entre las anotaciones de la médico tratante destaca que uno de los motivos por los que el paciente manifiesta haber salido de Maracaibo (su ciudad natal) es justamente porque “no se sentía a gusto con su vida en la ciudad”.
Miguel Pérez Pirela decía a la doctora Gagliardi: "Yo merecía mucho más que vivir en la provincia. Yo nací para ser reconocido y adorado por todos”.
Recuerdan los antiguos amigos del filósofo y ahora candidato a la alcalde, que al principio lo trataban por ser un joven respetuoso, pero cuando hablaba parecía contar "historias fabulosas de batallas épicas".
"Pensábamos que su forma de ser era exagerar un poco las cosas, pero lo peor vino cuando se juntó con Mario Silva y se metió a artista de televisión”, comentó uno de sus allegados que reside en Caracas.
Algunas de las personas del entorno más íntimo de Miguel Pérez Pirela, dijeron con preocupación que éste abandonó su tratamiento psicológico para dedicarse de lleno a los medios de comunicación.
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