Los educadores se quejan de la
irregularidad en la distribución y falta de calidad de los planes del Programa
de Alimentación Escolar. Las escuelas del oeste de Maracaibo son las más
afectadas. De 11 semanas de clases, recibieron los insumos alimentarios en
tres. Con recursos propios garantizan los platos de comida
Si desean repetir, no hay. Con esfuerzos, la escuela Astolfo Romero, del
barrio Cassiano Lossada II, logra alimentar a los 529 niños de la parroquia
Antonio Borjas Romero inscritos en su matrícula en dos turnos. El martes y
viernes solo ingieren nutrichicha o lactovisoy (líquido a base de carbohidratos
y proteínas). Los tres días restantes se alimentan de un poco de pollo
acompañado de arroz.
Si el arroz no alcanza tras la verificación de los niños asistentes, los
docentes desembolsillan para comprar un paquete de granos en el abasto de la
esquina. Y es que los insumos, señala Édinson Colina, director de la escuela,
bajaron de manera progresiva.
Doce litros de aceite incluía el PAEZ en su listado en 2011; tres años
después, las madres procesadoras deben rendir uno para la matrícula, que se
mantiene igual. El queso desapareció de las opciones y las verduras parecen
tomar el mismo camino. Cebolla, cebollín y ají dulce son las únicas repitientes
semana a semana.
El último menú del plantel programaba para el miércoles “pasta a la
napolitana”, pero no se incluyeron tomates, salsa ni mucho menos carne molida.
Gualberto Mas y Rubí, presidente del Sindicato Único del Magisterio Zuliano,
denuncia que en las escuelas de Maracaibo Oeste dependientes del Gobierno
regional se repite el informe: pasta o arroz, pollo o carne, acompañados con
chicha, con la gravedad de no ir acompañados de verduras. Son los docentes
quienes de su bolsillo compran lo necesario para la preparación.
“Debí pedir recursos a los maestros para comprar mortadela, rallarla y
entregarla a los 349 niños de la matrícula con arroz. El pollo se manda a moler
a una madre de manera gratuita. En una semana no me llevaron Quacker ni
nutrichicha. A veces no tengo qué darles a los estudiantes”, reclama Lucilda
Jiménez, directora de la Escuela Luis Hómez, en la parroquia Antonio Borjas
Romero.
En el plantel, apunta, no existen recursos suficientes para comprar una
bolsa de leche a 200 bolívares si el PAEZ no envía el suplemento nutritivo. Los
gastos de infraestructura más los 200 bolívares que se invierten en la
adquisición de la bombona de gas a falta del servicio por tubería no deja para
excesos en el presupuesto.
Comparación del menú
2013
·
Lunes: Carne guisada con
vegetales, arroz blanco y refresco de tamarindo.
·
Martes: Ración de queso
con yuca cocida y margarina.
·
Miércoles: Carne guisada con vegetales, plátano cocido, y refresco de tamarindo.
·
Jueves: Arepa rellena con
queso y salsa. Refresco de avena con leche.
·
Viernes: Lentejas guisadas con arroz blanco y refresco de avena.
2014
·
Lunes: Arroz con pollo y
vegetales. Refresco de fruta.
·
Martes: Nutrichicha.
·
Miércoles: Pasta napolitana con verduras.
·
Jueves: Pollo mechado con
arroz blanco y refresco de fruta.
·
Viernes: Lactovisoy o chicha.
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